Todo empieza con una pirámide

¡Bienvenidxs!

Te damos la bienvenida a este curso online sobre Economía Circular, el curso se desarrolla en 4 módulos:

  • M1 · Entender el paradigma lineal y sus consecuencias
  • M2 · Hacia el nuevo paradigma circular
  • M3 · Estrategias de circularización con ejemplos
  • M4 · Avanzando hacia la circularidad

¿Estás listx? ¡Empezamos por una introducción!

Introducción

"La Economía Circular es un nuevo paradigma económico que se basa en la restauración y la regeneración a través del diseño, y que pretende conseguir que los productos, componentes y recursos mantengan su utilidad y valor en todo momento. Se basa en dos metabolismos, uno biológico y uno técnico y promueve un ciclo continuo de desarrollo positivo que conserva y mejora el capital natural, optimiza el uso de los recursos y minimiza los riesgos del sistema al gestionar una cantidad finita de existencias y unos flujos renovables" según la Ellen MacArthur Foundation, organización que promueve desde 2010 el concepto.

Es una perspectiva ambiciosa, desafiante y más atrevida que la Economía Verde (una economía eficiente en recursos) puesto que requiere la transformación radical de los medios de producción, de las cadenas de suministro, de la cultura y de los hábitos de consumo a nivel planetario.

"La Economía Circular NO es gestión de residuos sino la búsqueda mucho más ambiciosa de mecanismos socio-económicos que regeneren los ecosistemas naturales y promueven el bienestar, salud y felicidad de todo ser vivo" N. Cerantola

Para entender mejor esta propuesta y, antes de entrar en detalle conviene mirar hacia atrás, hacer un breve recorrido al origen de nuestra especie para identificar y entender mejor las condiciones que han sentado las base del modelo actual y las razones que han favorecido ciertos patrones socio-culturales y económicos que siguen siendo determinantes. 

Con este paréntesis espacio-temporal se pretende poder atajar el tema desde una perspectiva más amplia, posiblemente más exitosa puesto que sin entender los mecanismos de la linealidad difícilmente podremos construir un discurso sólido para la transición hacia el nuevo paradigma de la Economía Circular.

¿Arrancamos? ;)

Para seguir profundizando..

Origen lineal

Desde el origen de la especie, las sociedades humanas han estado extrayendo y explotando los recursos naturales disponibles para satisfacer sus necesidades básicas. Este aprovechamiento del entorno natural se ha estado llevando a cabo desde siempre en pequeña escala, y alcance local, en forma de actividades extractivas / productivas como la caza, recolección, agricultura, actividades madereras o mineras o, en forma indirecta, a través del comercio. 

Los estilos de vida eran sencillos, las comunidades desarrollaban y adaptaban sus culturas para fomentar conductas que aumentaran sus opciones de supervivencia. Nacían leyendas, religiones y códigos escritos que ayudaban el individuo a hacer lo justo, lo normal. Cuando estos paradigmas no estaban bien encajados en el contexto natural local, llevando las sociedades a acabar con sus recursos o porque algún actor externo intervenía - como en el caso de invasiones y guerras tribales -, el conflicto se abría paso hasta que un nuevo equilibrio se establecía a  la espera de la siguiente situación de necesidad. 

La producción y consumo de productos y servicios - imaginando como servicios: rituales chamánicos, negocios u otras formas intangibles primitivas -  eran altamente personalizadas y se basaban en la satisfacción de necesidades básicas en un contexto de proximidad. Los elementos generados, en esta cadena de suministro, en forma de objetos, estructuras y alimentos eran pocos, mayormente compuestos por material orgánico perecedero, disponible localmente según el clima y el acceso a territorios. 

Prendas de fibra natural o cuero, objetos de madera o alimentos suponían los bienes más comunes de las pequeñas sociedades tribales y sucesivamente estatales. Eran elementos, que una vez utilizados - consumidos - se devolvían al entorno para su degradación natural en una espacio  razonablemente corto de tiempo. Su biodegradación era tan rápida que existían dentro del conjunto del know-how familiar, apartados específicos que contenían información para tratar de alargar la vida de estos productos perecederos a través de técnicas de conservación: deshidratación, curtido, curado, etc. 

Curtido de pieles con técnicas tradicionales, Fez (Marruecos, 2015). Foto: Nicola Cerantola

Existían, sin embargo, también otros elementos, más escasos dentro de ese conjunto cotidiano, mucho más complejos por la tecnología o por la energía necesaria para su producción y aprovechamiento. Eran más valiosos, por el tiempo, el esfuerzo y el coste que suponía su fabricación u obtención. Armas y utensilios de acero o bronce, joyas y objetos de oro, vasijas de vidrio o cerámica, hasta monumentos y castillos en piedra representaban las mayores fortunas alcanzables y acumulables. 

Estos elementos, a diferencia de los perecederos, al concluir su vida útil no eran normalmente desechados, sino todo lo contrario, se reparaban, vendían, heredaban o se los incluía en tumbas y sitios sagrados para que el fallecido pudiera utilizarlos en la vida siguiente y así duraran para siempre. 

Accesorio en metal, Marrakech (Marruecos, 2015). Foto: Nicola Cerantola

Estos productos, inertes con el entorno - por su naturaleza inorgánica - y no degradables a su estado original en una escala temporal comparable con la humana, componían un conjunto de materiales nuevos, creados ad hoc por el ser humano, algo inédito en la historia de la Tierra. Por primera vez, se podía empezar a hablar del término artificial y de metabolismo técnico - o tecnológico -.

Esta primera y rudimentaria distinción nos sirve para empezar a definir conceptos tales como nutriente, algo que como veremos, es relativo, porque depende del aparato digestor al que éste se asocia. 

Este patrón de extracción, manufactura, uso/consumo y disposición final todavía en función, se le define como Economía Lineal, porque consta de un proceso lineal de A a B. Es algo que parece incompatible con un entorno finito como es la Tierra y su capital natural limitado. Si lo que se extrae como elemento A se convierte en B no puede volver a ser A ni por acción humana ni natural, significa que en un entorno finito como es la Tierra, ese A llegará a agotarse dejando en su lugar B desde el cual no será posible extraer más valor una vez acabada su función o su calidad.   

Como vemos, la creación de una nueva categoría de materiales artificiales B, ajena al ciclo biológico y cuya concentración o composición química, amenace a los ecosistemas suponen las bases de un modelo lineal que no puede ser viable en el tiempo.

Recursos adicionales para curios@s:

Un test de auto-evaluación para ti..

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